domingo, 27 de diciembre de 2015
Mensaje de Navidad 2015-16
Monseñor Grégoire a la Iglesia Ortodoxa de Barcelona
Bois-Aubry, le 15 décembre 2015
Hijos e hijas queridos ,
En mi mensaje de Pascuas, del pasado abril, os evoqué esta sentencia de nuestro bienaventurado San Ireneo: " La gloria de Dios es el hombre viviente".
Hoy quisiera adjuntar : " La gloria del hombre es el Verbo de Dios encarnado".
En estos tiempos cuando la tentación de desesperar de la natura humana es tan grande, en estos tiempos en que el descorazonamiento no cesa de aumentar, que esperanza, que fuerza tenemos puesta en este reconfortante pensamiento : Dios no desdeña hacerse humano, no juzga la encarnación como indigna de Él, sino que la desea, la preparó por toda la eternidad en su inmenso amor, que nos tenia desde el orígen haciendonos a su imagen y semejanza. Dios no se averguenza de ser llamado con un nombre humano, pues puso en nosotros por su Espíritu, la energia necesaria para complir su voluntad. Si, como toda la creación la naturaleza humana es buena. Si, Dios se hace hombre para que el hombre se haga dios por la gracia.
En nuestro alrededor, justificamos esta confianza y esta dignidad. Alzemos la cabeza y elevemonos hacia Dios, en esta solemnidad de su Encarnación, nuestros himnos de accion de gracia- los angeles mismos nos invitan :
"Gloria a Dios en lo más lato de los cielos, paz sobre la tierra y a los hombres e buena voluntad"
Feliz y Santa Navidad.
+Grégoire
par la miséricorde de Dieu, évêque d’Arles et de l’Eglise Orthodoxe des Gaules