Mensaje de Navidad 2015-16
Monseñor Grégoire a la Iglesia Ortodoxa de Barcelona
Bois-Aubry, le 15 décembre 2015
Hijos e hijas queridos ,
En
mi mensaje de Pascuas, del pasado abril, os evoqué esta sentencia de
nuestro bienaventurado San Ireneo: " La gloria de Dios es el hombre
viviente".
Hoy quisiera adjuntar : " La gloria del hombre es el Verbo de Dios encarnado".
En
estos tiempos cuando la tentación de desesperar de la natura humana es
tan grande, en estos tiempos en que el descorazonamiento no cesa de
aumentar, que esperanza, que fuerza tenemos puesta en este
reconfortante pensamiento : Dios no desdeña hacerse humano, no juzga la
encarnación como indigna de Él, sino que la desea, la preparó por toda
la eternidad en su inmenso amor, que nos tenia desde el orígen
haciendonos a su imagen y semejanza. Dios no se averguenza de ser
llamado con un nombre humano, pues puso en nosotros por su Espíritu, la
energia necesaria para complir su voluntad. Si, como toda la creación
la naturaleza humana es buena. Si, Dios se hace hombre para que el
hombre se haga dios por la gracia.
En
nuestro alrededor, justificamos esta confianza y esta dignidad. Alzemos
la cabeza y elevemonos hacia Dios, en esta solemnidad de su
Encarnación, nuestros himnos de accion de gracia- los angeles mismos nos
invitan :
"Gloria a Dios en lo más lato de los cielos, paz sobre la tierra y a los hombres e buena voluntad"
Feliz y Santa Navidad.
+Grégoire
par la miséricorde de Dieu, évêque d’Arles et de l’Eglise Orthodoxe des Gaules